'Si un fuego que recién comienza se le pone una excesiva cantidad de leña, el fuego termina por ahogarse...'
Cuantas veces la emoción vence a la razón, la desesperación se apodera de la paciencia, la excitación sobrepasa a la tranquilidad...
La adrenalina no es siempre buena compañera, es un muy buen recurso, pero no es la reina de la fiesta, cuando están llegando los invitados.
Las situaciones que vivimos dia a dia no deben verse forzadas por caprichos ingenuos e inocentes, si éstas verdaderamente nos interesan y nos importan debemos darles el tiempo para que maduren por si solas y así si poder disfrutar de su jugo...
No ahoguemos el fuego... añadamos leña fina de a poco, démosle oxigeno y no lo abandonemos... recién ahi podremos inundar el campamento con su luz y su calor.
Imaginemos un noviazgo que comienza excitadísimo y con objetivo inmediato de llegar a relaciones intimas...
Imaginemos un negocio que se planifica en 2 dias con todo el capital invertido...
Imaginemos un adolescente que pierde la cabeza y comienza a salir a temprana edad...
Imaginemos...
Todas estas, y tantas otras, situaciones pueden causar un buen momento, pero no daran luz y calor a nuestro campamento.
No desesperemos, no atosiguemos, seamos confiados y pacientes que las cosas en su debido momento... queman mejor.
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